Parece ser que desde hace un par de años la comisión y el artista han encontrado cual es la línea sobre la que trazar sus proyectos, desechando para el remate diseños que no les funcionaron del todo bien, pero conservándolos para unos bajos que pegan con todo, el método sin duda alguna se compone de: dimensiones guliberianas, temáticas abiertas a ideas, bajos excelentes, remate con toque Lladró y sobre todo un buen acabado y seriedad que caracteriza a los trabajos de este gran artista. Muchos pensamos en: “otra infantilada”, pero no hay que restarle mérito a este, por tercer año consecutivo, ambiciosísimo proyecto que una vez más vuelve a ser el punto de mira y con el cual la comisión intentara hacer justicia a un segundo premio que les supo a poco. No creemos que pueda ser este el año de esta comisión pero sin duda quedará muy bien, igualmente esperamos que no lo aprovechen para subir el precio de la entrada, que tras años teniendo una ética ejemplar en la recaudación de las entradas, no fue muy leal con los visitantes que todos los años disfrutábamos del monumento.
Equipo Socarrats.
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